Seguro de Ciberriesgo
La protección digital que tu empresa necesita
¿Qué es un seguro de ciberriesgo?
En un mundo cada vez más conectado, los ciberataques ya no son cosa de grandes corporaciones. Cualquier empresa, por pequeña que sea, puede sufrir un robo de datos, un ataque de ransomware o una suplantación de identidad digital.
Un seguro de ciberriesgo te protege frente a estos incidentes, cubriendo tanto las pérdidas económicas como los costes técnicos y legales que pueden derivarse de un ataque informático.
Carlos Palomino Moreno
He sido el primer mediador a nivel nacional en conseguir una sentencia favorable contra una entidad de banca-seguros.
Protección de datos
Cubre los costes derivados del robo, filtración o pérdida de datos personales o sensibles almacenados por tu empresa.
Asistencia técnica
Incluye servicios de expertos en ciberseguridad que actúan rápidamente para contener el ataque y evitar daños mayores.
Responsabilidad
Te protege frente a reclamaciones de terceros si un fallo de seguridad en tus sistemas causa perjuicio a clientes.
Gastos asociados
Desde costes legales hasta sanciones por incumplimiento de la RGPD, pasando por recuperación de información.
Interrupción del negocio
Si un ciberataque paraliza tu actividad (por ejemplo, bloqueando tus sistemas o webs), el seguro cubre la pérdida de ingresos mientras recuperas la operativa, ayudándote a minimizar el impacto financiero.
Extorsión digital y ransomware
Cubre los costes derivados de amenazas como el secuestro de datos (ransomware), incluyendo negociaciones, pagos de rescate bajo supervisión y restauración de archivos.
Auditoría y prevención
Incluye servicios de análisis de vulnerabilidades, formación para tu equipo y asesoramiento técnico para reducir los riesgos antes de que ocurra un ataque.
Una barrera eficaz frente a las amenazas digitales más críticas
¿Qué cubre el seguro de ciberriesgo?
El seguro de ciberriesgo no solo actúa cuando el daño ya está hecho: también te acompaña en la prevención, la detección y la respuesta ante cualquier incidente digital. Desde ataques informáticos hasta errores humanos o fallos en el software, esta cobertura te permite operar con tranquilidad en un entorno cada vez más vulnerable.
Una inversión ajustada al tamaño y riesgos de tu empresa
¿Cuánto cuesta un seguro de ciberseguridad?
El precio de un seguro de ciberriesgo varía según el tipo de actividad, el volumen de datos que gestionas, el nivel de exposición digital y las coberturas que necesites. No es lo mismo proteger una tienda online que una asesoría con cientos de clientes. Por eso, más que un precio estándar, lo que necesitas es un análisis realista y personalizado.
Inversión flexible
Hay opciones básicas desde menos de 300 €/año para pequeñas empresas con riesgos limitados.
- Cuanto más complejos sean tus sistemas o más datos sensibles manejes, mayor será el nivel de cobertura y, con ello, el coste.
- El impacto económico de un ciberataque suele ser muy superior al precio anual del seguro.
- Muchas pólizas incluyen auditorías y formación en ciberseguridad, lo que añade valor más allá del coste puro.
¿Quieres más información?
FAQ
Preguntas frecuentes
Se que elegir el seguro adecuado puede generar muchas dudas. Por eso, he preparado esta sección con respuestas claras y sencillas a las preguntas más comunes. Mi objetivo es ayudarte a tomar decisiones informadas y encontrar la mejor protección para ti, tu familia o tu negocio.
Sí, sin duda. La mayoría de ataques informáticos hoy en día van dirigidos a pymes, precisamente porque suelen tener menos medidas de seguridad. El seguro de ciberriesgo te da una red de protección ante cualquier imprevisto digital.
El seguro de ciberriesgo puede cubrir tanto la investigación del incidente como la notificación a tus clientes, el soporte técnico para recuperar los sistemas y las posibles sanciones por protección de datos.
No necesariamente. Aunque suele usarse en empresas con carteras grandes de clientes, también puede ser útil si trabajas con pocos clientes, pero de alto volumen, o si dependes mucho de uno o dos clientes clave. La clave está en el riesgo que representa el impago de esas facturas, no tanto en la cantidad de clientes.
No es obligatorio por ley, pero sí muy recomendable, especialmente si tratas con datos sensibles, tienes una tienda online o prestas servicios digitales. Además, puede ser un valor añadido si trabajas con grandes clientes que exigen ciertas garantías.